Tarta del gato Papelote

Hace unos días fue el cumpleaños de mi sobrino Mario y tuve la oportunidad de hacerle esta riquísima tarta para su fiesta. Quería tener a la mascota de su cole en la tarta así que se la hice de azúcar...pero esta vez no usé fondant para cubrirla, sino ganaché de chocolate. Y tengo que decir que disfruté como una enana cubriendo la tarta e intentando que quedara lo más lisa posible. He visto muchos vídeos en internet de la mejor forma de hacerlo, es decir, usando cartones arriba y abajo, solo arriba...pero yo la he hecho sin usar esa técnica, simplemente usé mi amada tabla giratoria de ikea, y digo amada porque ahora la uso casi a diario, aunque ha estado aaaaaaños muerta de la risa en un rincón de mi cocina.

Está hecha de bizcocho de chocolate y rellena de crema pastelera y crema de nata y mascarpone.

Para el ganaché se necesita: 400 ml de nata (de la de montar) y 400 g de chocolate negro. Se hace poniendo en un cazo al fuego la nata y cuando ésta empieza a humear se le añade el chocolate y se remueve hasta que esté totalmente fundido. Después tiene que dejarse fuera de la nevera por lo menos ocho horas. Yo lo hice de un día para otro.

Para cubrirla se pone la tarta sobre la tabla giratoria. Se pone un buen pegote de ganaché en la parte de arriba y con la espátula, se intenta dejar lisa sin importar que sobresalga por los bordes. Después, se va poniendo por los laterales también una buena capa. Y llega la hora de alisar, para ello, se pega la espátula a la tarta en vertical  formando un ángulo de 45 grados y se va dando vueltas a la base (sin mover la espátula).

Para volver a alisar la parte de arriba, se pasa la espátula en horizontal  varias veces. Por último se mete la espátula en agua caliente, se seca, y se vuelve a pasar por todos lados.

Parece laborioso pero es muy divertido, y además estaba tan rica, que no será la última vez que lo haga :)

Espero que os haya gustado

Un beso y hasta la próxima